martes, 11 de junio de 2013

La Decisión de Tino

Mi nombre es Tino y me gustaría relatar mi vivencia en el mundo de las drogas, pudiendo hablar ahora desde fuera de ellas y de una manera objetiva.
Yo empecé a tomar alcohol cuando tenia 13 años, no era consciente del riesgo que corría, "solo quería divertirme"
Empecé bebiendo alcohol los fines de semana, con los amigos: cerveza, whisky,  cada vez era más grande la cantidad que bebía.
Cuando cumplí los 14 años empecé a fumar porros, "pillábamos costo" entre varios amigos, nos lo fumábamos en el parque o en el campo de uno de ellos, yo pensaba que fumar porros me hacia molar más, me sentía importante y más mayor.
Yo por esa época jugaba al fútbol y los efectos del alcohol y el hachis aun no me impedían seguir jugando, los excesos solo eran los fines de semana.
Seguí coqueteando con el mundo de las drogas sin darme cuenta que cada día estaba más inmerso, con 17 años probé mi primer "pico" de heroina, eran las fiestas de mi pueblo.
No imaginaba que ese día cambiaria mi vida.
Ya había cruzado otra barrera y a partir de entonces da igual como se llamara la sustancia LSD, SPEED, todo lo que estaba de moda en el ambiente nocturno y de discoteca...
A los 18 años cumplí el servicio militar, entonces el problema se agravó bastante más, mi consumo de heroína y alcohol se disparó, llegaba incluso a perder el conocimiento por los excesos.
Cuando volví a mi pueblo, con 20 años ,comencé a robar, cada vez necesitaba mas cantidad de droga y a la vez mas dinero, incluso robaba en mi propia casa, mi familia estaba realmente destrozada.
Los siguientes cuatro años fueron un infierno, ya era consciente de que tenia un problema, empecé mi recorrido por médicos y psicólogos siempre con el apoyo de mi familia, tomé todo tipo de tratamientos y pastillas raras, solo conseguía engancharme también a esos fármacos sin dejar mi adicción inicial.
Tuve que irme de mi casa, que yo había convertido en un infierno. Estaba degradado de tal manera que había perdido por completo mi dignidad, estaba tirado en la calle, dormía en algún albergue o en la calle, me lavaba cada 2 meses, no comía casi nada, sólo vivía para conseguir mi dosis de heroína.
Llegué a pesar 40 kg.
Un día la policía me encontró en coma por sobredosis, me habían quitado toda la ropa y estaba tirado en un polígono de la ciudad. A los 34 años ingresé voluntariamente en un centro de desintoxicación.
Allí pasé 12 años más como voluntario, ayudando a los chavales que llegaban destrozados ( como llegué yo)
De ésto ya hace tiempo, decidí enfrentarme con el mundo real, y os aseguro que no sólo no tomo drogas, es que soy un chaval feliz,que no necesita drogas para relacionarse con la gente, con una familia encantadora y a los que debo la vida.
Me dediqué a estudiar y próximamente, quiero ir a la Universidad. Conocí a Manuela, con la que me casé y decidimos que en nuestro proyecto de vida haríamos todo lo que pudiésemos para ayudar a otr@s a salir de ésta muerte horrible que es la droga.
Si  al leer éstas vivencias crees que vas por el mismo camino, no esperes a  llegar al final de él, yo conseguí ganar la batalla a las drogas y vivo para contarlo, pienso que soy afortunado.
Contacta con nosotros, con nuestro Proyecto "Libertad Sin Drogas". Cuenta conmigo.

2 comentarios:

  1. es espeluznante el testimonio,el mundo de las drogas es la plaga mortal del siglo xx-xxI

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  2. Tino, tú eres un héroe, has convertido el infierno en un cielo azul. Sabes ayudar mejor que nadie, porque tienes una bondad infinita y eres un superviviente. Estoy segura de que puedes cambiarle "el infierno" a mucha gente.

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